La historia de evangelización en América latina nos revela que el proceso de conversión a Jesucristo esta inconcluso. A esto hay que añadir la confusión, descristianización e indiferencia que azotan las masas católicas. Con eso crece la idolatría del dinero que trae la corrupción, la violencia y el culto al placer. Lo vemos… Los obispos colombianos ya nos habían hablado desde 1969 en “La Iglesia ante el cambio” sobre la necesidad de evangelizar. Y los cursillos pre-sacramentales, decían, son una oportunidad para hacerlo.
Hay parroquias en las que se preparan padres y padrinos durante una hora, sobre todo cuando se trata de campesinos. En las ciudades ya hay parroquias que exigen y ofrece algo más A los solos padres, para no complicar a los padrinos, pero al fin y al cabo, ofrecen para exigir. En las ciudades se pueden ofrecer más encuentros por la estabilidad y cercanía. Entre más estemos de acuerdo los párrocos en este servicio, mejor pastoral de conjunto podremos hacer.